La unidad de Heridas de la Organización Sanitaria Integrada (OSI) Barrualde-Galdakao es una unidad creada y dedicada al manejo y tratamiento de heridas complejas, crónicas o de difícil cicatrización. Esta unidad, ofrece cobertura sanitaria a 313.000 habitantes, además de proporcionar soporte, recomendaciones clínicas y alternativas terapéuticas a los profesionales sanitarios del Hospital Universitario Galdakao-Usansolo, del Hospital de Gernika, de 17 unidades de atención primaria (4 ambulatorios y 13 centros de atención primaria) y de 57 consultorios. La unidad se ubica en las propias instalaciones del Hospital Universitario Galdakao-Usansolo.
La unidad de heridas está liderada por Paz Beaskoetxea, enfermera con gran experiencia en este campo y referente nacional en el tratamiento de heridas complejas. Además, posee de una excelente vocación docente.
Esta unidad es pionera porque, no solo está formada por enfermeras, sino que se trata de un equipo multidisciplinar en el que trabajan conjuntamente cirujanos vasculares, traumatólogos, infectólogos, etcétera; que actúan de manera integrada para la resolución de heridas de difícil cicatrización. Cabe destacar que cada vez se suman más disciplinas a este proyecto. Es preciso mencionar, que uno de los principales valores de los miembros de la unidad es la comunicación y la capacidad de trabajar en equipo con el único de propósito de mejorar la asistencia a los pacientes.
La unidad se inauguró en 2016 y dio la casualidad que el primer paciente que se atendió fue el 12 de mayo, día Internacional de las Enfermeras. Hasta ahora no se le ha había dado excesiva difusión a la unidad; pero recientemente ha levantado muchas expectativas, fundamentalmente por los resultados que está obteniendo. Es por ello que los medios de comunicación se están haciendo eco de la actividad que desarrollan en noticias como esta, y esta otra.
Os adjunto una entrevista radiofónica en el que varias de las protagonistas describen la actividad de la unidad.
La unidad de heridas, por la singularidad de trabajar coordinadamente en equipo entre varios profesionales de la salud, está consiguiendo unos resultados muy positivos, que son los artífices del éxito. En primer lugar, se está disminuyendo el dolor del paciente y se está mejorando su calidad de vida. Por otra parte, se han gestionado correctamente los recursos humanos y materiales necesarios, reduciendo el número de curas semanales de estos pacientes. Además, se acorta el tiempo de recuperación y la estancia hospitalaria de los pacientes ingresados. Derivar a estos pacientes a una unidad específica para el tratamiento de este tipo de heridas, libera la ocupación de camas hospitalarias, pero también reduce las complicaciones derivadas de estar hospitalizado. En definitiva, se están obteniendo unos resultados en salud esperanzadores, con una eficiencia medible muy favorable. De hecho, se ha reducido la estancia hospitalaria una media de 2 semanas, cuando antes se pasaban varias semanas ingresados. Y esto es factible gracias a la posibilidad de derivar a los pacientes desde el domicilio a la unidad para el seguimiento de sus heridas.
En la unidad de heridas, no se cura o trata únicamente la herida o el lecho, se valora holísticamente al paciente, ofreciendo un tratamiento integral. Los pacientes que se tratan en esta unidad en su mayoría son crónicos y/o pluripatológicos. También se ven pacientes con úlceras de muchos meses de evolución; pero se tratan heridas de todo tipo. Fundamentalmente se tratan pacientes mayores, pero también jóvenes; aunque todos ellos con heridas complejas, de grandes dimensiones, que precisan un cuidado y tratamiento específico. También tratan pacientes con pie diabético, con una insuficiencia venosa, heridas quirúrgicas, heridas en extremidad inferior, amputaciones, e incluso de pared abdominal porque trabajan también con urología, cirugía, etc.
En la unidad de heridas se realizan diferentes tipos de asistencia. Por una parte, se atiende de manera presencial en las consultas de la unidad de heridas a los pacientes derivados de hospitalización, atención primaria u otros servicios (centros socio sanitarios, consultas externas, etc.). Por otro lado, se resuelven telemática y telefónicamente consultas derivadas de atención primaria, residencias y consultas externas mediante envío de fotografías, etc. Y, por último, la unidad ofrece la posibilidad de solicitar una interconsulta y valoración presencial desde cualquier servicio del hospital (UCI, urgencias, hospitalización, etc.) a través de la historia clínica electrónica (programa Osabide Global).
A partir de esa interconsulta las profesionales de la unidad emitirán una recomendación y opción terapéutica a los servicios solicitantes, o en su defecto y en los casos más complejos, asumirán el tratamiento y seguimiento de esos pacientes en la unidad.
A continuación, con objeto de mejorar la comprensión de la filosofía de trabajo de la unidad de heridas, expongo extractos de la entrevista que el Diario DEIA realizó a Paz Beaskoetxea (PB), enfermera responsable de la unidad y a Melina Vega (MV), cirujana vascular integrante de la unidad de heridas:
«Nuestra especialidad son las heridas complicadas. Antes, nuestros pacientes estaban muchas semanas ingresados por la localización, la extensión o la profundidad de la lesión o de su úlcera, pero gracias a servicios como éste, se pueden dar altas más tempranas” (MV).
“Cada paciente es único. «Tenemos que aportarle a cada uno lo que más necesita. No hay que tratarle de manera fragmentada, sino como un todo» (PB) (MV)
“La revolución es que, en lugar de ir peregrinando de consulta en consulta, el enfermo va a un sitio centralizado desde donde se organiza todo el tratamiento. » (MV)
«Aparte de altas tempranas, esquivamos entradas por la Urgencia, evitamos infecciones que provocan un gran consumo de analgésicos y antibióticos. La unidad es experta en una filosofía que se llama higiene de la herida ya que, gracias a una buena terapia local precoz, impedimos una enorme cantidad de infecciones. Yo creo que hemos conseguido una consulta de alta resolución”. (MV)
«El problema precisamente es que, si no atiendes correctamente una herida, se torna crónica y hemos tenido pacientes de años y años de evolución. Al final, el abordaje es complicado y si no lo controlas, puedes mantener a un paciente mucho tiempo con una herida abierta» (PB)
«Es que muchas veces son heridas que duelen, que huelen, que limitan la movilidad… y manejamos cada vez más pacientes mayores. Incluso, aunque sean más jóvenes, su edad biológica y cronológica no coincide. Están con diabetes, con patologías que les hacen muy frágiles y la calidad de vida merma un montón» (PB).
«Programamos sesiones clínicas, nos juntamos, exponemos los casos más complicados. Monitorizamos mucho a los enfermos para poder valorar algo que no nos gusta» (PB)
Un aspecto clave del éxito de la unidad, es que se ha conseguido mejorar la calidad de vida de los pacientes, se ha disminuido la prevalencia de las infecciones y del resto de complicaciones y se ha conseguido centralizar todos los cuidados entorno al paciente. Se trata de un equipo multidisciplinar, que se coordina para mejorar los procedimientos con el paciente como gran beneficiario.
Autoría: Gorka Vallejo.
Artículo con revisión editorial. No existen conflictos de interés en relación al presente artículo. Las opiniones expresadas son responsabilidad exclusiva de los/las autores/as y no reflejan, necesariamente, los puntos de vista de los/las editores/as. Artículo bajo licencia de Creative Commons: Reconocimiento 4.0 Internacional.
Este documento debe citarse como: “Vallejo G. Unidad de Heridas del Hospital Universitario Galdakao-Usansolo: cuando el trabajo multidisciplinar mejora los resultados en salud [Internet]. Enfermería Activa del Siglo XXI: blog abierto; 7 de junio de 2021. Disponible en: www.enfermeriaactiva.com”